A veces nos hemos preguntado cómo podría inculcar el amor a la lectura, si llevamos una vida muy atareada, con los deberes de la escuela, el trabajo, la vida diaria y el agotamiento, ¿De dónde saco el tiempo para ser ejemplo de mis pequeños?

   La lectura durante la niñez cumple un papel muy importante ya que se da paso a la imaginación, se fomenta el vínculo emocional, mejora su vocabulario, comprensión y se motiva el amor por el aprendizaje y el interés por el mundo. Tomarse el tiempo para leer puede crear momentos significativos. Les irá ofreciendo conocimientos sobre el mundo que les rodea y les abrirá las puertas a nuevas ideas y culturas.

  Será una herramienta poderosa para el crecimiento y el éxito en todas las áreas de su vida.

  Con momentos claves y hábitos que sean repetitivos durante la semana y si va siendo progresivo le ayudarías mucho.

• Crear un ambiente de lectura, cómodo y tranquilo.
• Crear un ritmo regular, estableciendo un tiempo, creciendo poco a poco el tiempo que se le dedica.
• Conversar con ellos sobre lo que están leyendo, podría ser una actividad familiar divertida
• Realizar un dibujo sobre lo que ha leído, ir exponiéndolo en un lugar especial de la casa.

   Así se les puede ir dando el ejemplo que aunque la vida esté llena de responsabilidades, siempre hay tiempo para disfrutar juntos de la magia de la lectura.

  Personalmente uno de los libros que me inculco la curiosidad por la lectura fue “El perro de los Baskerville” de Arthur Conan Doyle, para mí fue un descubrimiento de un mundo de misterio, y lo recuerdo con una ágil narrativa que me llevaba a momentos de suspense en los que no podía parar de leer.

  En casa siempre había visto infinidad de libros por muchos rincones y a mi padre leer en las largas, oscuras y silenciosas tardes de invierno donde lo único que se oía era el viento soplar entre las rendijas de la puerta de casa.  Lo que me proporcionaba una sensación de seguridad dentro de ella y es un momento que recuerdo con una bella nostalgia.

  Estas situaciones supongo han influido en que actualmente tenga el hábito de la lectura y disfrute de vez en cuando de algún libro que me transporte a lugares recónditos y misteriosos.

  Por ello, no dejen pasar esta oportunidad de disfrutar de estos momentos con sus niños los cuales ya no habrá tiempo para que se vuelvan a repetir.

  Y así probablemente sus hijos tengan un bello recuerdo de ustedes.