Aprendemos jugando?

Se escucha de lo importante que es valorar el desarrollo equilibrado de la motricidad gruesa y fina en los niños. Las cuales se fomentan a través de actividades prácticas, juegos al aire libre y artes manuales que promueven la coordinación y fuerza en movimientos grandes, como la destreza.

 Esta mirada integral busca apoyar el desarrollo físico y cognitivo de los niños de manera armoniosa.

El juego, es la forma natural en la que los niños exploran, experimentan y aprenden sobre el mundo que les rodea.

Es por esta razón que se enfatiza la importancia del movimiento y la actividad física en el desarrollo infantil. El juego se considera una joya invaluable y fundamental en el proceso escolar. Es la chispa que enciende la imaginación de los niños, permitiéndoles explorar el mundo con ojos llenos de asombro y curiosidad.  Se considera una herramienta vital para el desarrollo integral de los pequeños fomentando la creatividad, el trabajo en equipo  y el desarrollo físico.

A través del juego, no solo aprenden conceptos, sino que también cultivan valores como la colaboración, la empatía y la creatividad, creando así un ambiente de aprendizaje lleno de magia y alegría.

 Las actividades como juegos al aire libre, danzas, artes manuales y actividades prácticas ayudan a promover el desarrollo físico de los niños. Cuando el niño juega está vivenciando y fortaleciendo el equilibrio, la coordinación, la fuerza y la destreza motora de manera gradual y natural, permitiendo que los niños exploren y desarrollen sus habilidades físicas.

Hoy en día, cuesta más ver a los niños correteando, jugando, creando y uno de los factores que pueden contribuir a esto  es el aumento en el uso de dispositivos electrónicos y el entretenimiento digital, que puede llevar a que los niños pasen más tiempo en interiores y menos tiempo al aire libre. Además, el aumento en las responsabilidades escolares y extracurriculares también podría limitar el tiempo disponible para el juego libre. Por otro lado, las preocupaciones de seguridad de los padres podrían llevarlos a restringir las actividades al aire libre de sus hijos.

Muchas veces hemos oído “los niños de hoy en día ya no saben jugar”, pienso que deberíamos de darles la oportunidad de jugar y su imaginación se echará a volar.

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